KIT DE SUPERVIVENCIA. CRÍTICA, IRONÍA, REALIDAD

La obra que presentamos aquí se escapa de nuestra capacidad de catalogación (puede tener características de un poema-objeto, también de un libro de artista, pero tengo argumentos para considerarlo, incluso, un poema-acción...), pero de lo que no me cabe ninguna duda es que nos ha llegado como una envío único a nuestra Convocatoria. Nadie nos ha enviado un KIT DE SUPERVIVENCIA como este, crudo y amargo, pero tan real como la vida de los refugiados.

(Si pinchas en las imágenes leeréis todas las indicaciones)

Un pasaporte, una brújula, indicaciones para intentar cruzar las fronteras, las respuestas a dar, el precio a pagar... Y otros detalles que solo se aprecian en condiciones teniendo entre nuestras manos. Este paquete refleja una posición sin ambigüedades sobre la realidad que sufren los refugiados en Europa, por ejemplo. Y aunque el trabajo era anónimo, uno no puede sino indagar, descubrir a su autora, para cerciorarnos de una deducción obvia: la persona, la artista que ha hecho este trabajo sabe de lo que está hablando. Después de pensarlo mucho, hemos decidido acompañar este trabajo, este KIT DE SUPERVIVENCIA con sus propias palabras. Os dejo su texto íntegro y literal:

La primera sensación que tuve al llegar a Atenas para echar una mano a lxs refugiadxs  fue la de percibir la coexistencia paralela, pero sin rozarse, de dos mundos. Uno formado por instituciones, leyes, derechos, y personas con derechos y privilegios, que habitaban (habitábamos) una ciudad turística, activa, vivible. Y otro mundo de no-personas, no-ciudadanxs, que llenaban sus calles, sus parques, los campos y okupas, pero que no existían para casi nadie. Como si no estuviesen; como si sus tiendas de campaña, sus rostros, sus heridas, sueños y pesadillas no estuviesen allí.

Dos mundos que ocupan la misma ciudad pero que no se tocan. Un mundo, el primero, que se desarrolla al margen de las tiendas de campaña, los edificios okupados, las personas durmiendo en los parques. Otro mundo, el segundo, formado por personas que viven en la invisibilidad. Y que es a ésta a la que tienen que acudir para sobrevivir; a la opacidad, a la sombra peligrosa de mafias, grupúsculos o líderes de dudosa ética que organizan las vidas de quienes no tienen nada y necesitan vivir.

Porque este mundo, el de lxs no-ciudadanxs, también está ignorado por la Unión Europea, que se salta a todas luces y conscientemente sus propias leyes, el Derecho de Asilo, la protección a la infancia, etc. Y es esto lo que deseaba denunciar a través de mi participación en la convocatoria de mail art: como el cierre de fronteras y la dejación absoluta de sus funciones por parte de la hipócrita y asesina Unión Europea conllevan necesariamente el surgimiento y enriquecimiento de mafias. Porque los intentos de huir, de abandonar el peligro, de saltar vallas o cruzar mares y océanos no van a desaparecer. Y si la UE no les permite pasar  (y si nosotrxs no les permitimos pasar), no faltaran quienes les pidan cifras desorbitadas por un trozo de cartón simulando un pasaporte o un asiento en una barca hinchable.

No hay nada más que añadir a su obra. Pero quiero completarlas con dos líneas sobre la autora. Estas palabras son de Marta Medrano Martín, una artista ocasional. Nunca había participado en una Convocatoria como la nuestra, pero ha demostrado que la implicación personal, la solidaridad y el talento artístico se conjugan de manera magistral en su sensibilidad. Nuestra gratitud es enorme porque no se puede explicar mejor una realidad como la que ha vivido ella como cooperante y viven diariamente los refugiados. Por todo ello, y muchas más cosas, agradecemos su excelente trabajo, que sin duda, elevan exponencialmente nuestra Convocatoria.