MAIL ART EN LA ESCUELA

Si miramos el origen y la historia del mail art, el nombre de Joseph Beuys, aparecerá más pronto que tarde. De su obra, de su personalidad, de sus posiciones estéticas, muchos recuerdan -para ponerlo en los altares o para quitarle todo valor-, aquello de que "todo ser humano es un artista". Nosotros apoyamos esta idea, sobre todo, porque en la docencia necesitamos albergar esa esperanza para hacer avanzar en sus distintas capacidades al alumnado que tenemos en nuestras manos. Y lo creemos firmemente, porque, de repente, en una convocatoria cualquiera, en la IV, por ejemplo, recibimos un sobre como el siguiente y sabes qué algo va a pasar: Y no defrauda las expectativas, aunque la sorpresa se multiplica y te quedas sin palabras al tener entre tus manos una obra de arte de primer nivel (un escaneo es imposible que albergue todos los detalles, porque es incapaz de reproducir la textura, los contornos, y el volumen de una de sus caras, aunque si se amplía la imagen, nos podemos h...

La búsqueda de un estilo propio suele ser uno de los quebraderos de cabeza más acuciantes para los artistas. Que el espectador o el lector sea capaz de reconocer en una obra, en un libro, en un poema o incluso en un solo verso la probable autoría del mismo, no es una cuestión baladí. En el caso de Maya López Muro, sin embargo, su nombre no haría ni falta, porque sus envíos son reconocibles, ya que poseen un estilo propio. Esos brazos, esas siluetas y la forma de componer con el color sus obras la identifican. (Pincha para amplia) (Pincha para ampliar) No obstante, cuando se recibe algo de esta artista, queda claro que hay algo más en su interior. La postal guarda un secreto dentro y hay que descubrirlo. No sin pulcritud. Porque son tan frágiles estas obras que no deseamos romper o deteriorar nada de ellas. Aunque a veces es inevitable y esto forma parte de la esencia del mail art, por supuesto. Lo primero que se ve cuando se abre el primer pliegue es lo siguiente: ...