BREVE ANÁLISIS DE UNA OBRA DE MAIL ART. EL EJEMPLO DE CLEMENTE PADÍN

Clemente Padín (Lascano, Rocha, Uruguay, 8 de octubre de 1939) es poeta, artista y diseñador gráfico, performer, videoartista multimedia y networker. Como no soy un especialista, me atrevo a decir que es un referente mundial en el mail art y su estilo es inconfundible. Por ello, nos va a servir para realizar un breve análisis de los componentes de una obra de mail art.

La obra que ha enviado es la siguiente:

Lo primero es el material. Como puede apreciarse en la segunda imagen, ha usado un simple cartón. No es extraño si asumimos que en este tipo de obra, el arte povera, el reciclado sobre todo, juega un papel fundamental. En el mail art se acepta cualquier material. 

La primera imagen identifica el estilo de Padín. El poema visual PAZ=PAN es tan conocido que cualquiera reconoce dicha imagen, aunque no se sepa quién es su autor, hasta ahora, claro. Por otro lado, Padín recurre a la contrapublicidad, con un anuncio reconocible pero que descontextualiza intencionadamente. Además añade una especie de sellos a modo de señales que lo identifican como autor e imágenes recurrentes en sus obras: los angelitos, las estrellas...

Por otro lado, en la segunda imagen aparecen otros elementos claves. Por ejemplo, los propios sellos de autor. En este caso aparecen tres y los tres con mucha intención. En el centro, aunque no lo sé con seguridad, un sello que recoge una performance del autor, otras de sus facetas, como hemos señalado más arriba. En la esquina izquierda un sello con las figuras claves del experimentalismo en latinoamerica: Vigo, Deisler y el propio Padín. Para el que desconozca toda esta corriente de la creación literaria y artística, aquí aparecen los nombres propios más importantes para comenzar a investigar. Más abajo, como una especie de autorretrato, una imagen dura, ya que en la zona de los ojos aparecen dos personas, con nombres y apellidos: Amelia Sanjurjo y Julio Escudero, desaparecidos políticos bajo la dictadura uruguaya (1973-1884). Por último, el sello a franquear no es cualquier sello, uno de ellos contiene la siguiente cita: Nada podemos esperar sino es de nosotros mismo. 
La conclusión: no hay nada gratuito ni baladí. Todo en la obra está pensado para formar parte de la Convocatoria y todo con mucho sentido conceptual y estético. Las breves reseñas que me he permitido apuntar aquí brevemente pueden servir como un acercamiento teórico inicial a las obras de mail art.

Se me olvidaba: el matasellos de la estafeta de correos nos brinda mucha información: el lugar desde el que se envía y la fecha concreta.


NOTA FINAL. Reproduzco un párrafo de MAIL ART. LA RED ETERNA (ed LUPI). Página 36.

"Esta urgencia por comunicar un arte vivo queda también de manifiesto en Uruguay. Clemente Padín, participante activo del arte correo desde finales de los sesenta, ha servido de inspiración a una generación entera de artistas sudamericanos. Poeta visual y activista político, Padín fue encarcelado durante algún tiempo en los setenta por sus actividades postales. Esto provocó una campaña mundial a través de la red postal para su puesta en libertad y la de su compatriota Jorge Caraballo. El arte correo en Sudamérica adopta una postura política en respuesta a las condiciones de represión imperantes. De manera que no fue una sorpresa que se celebrara, en septiembre de 1987 y en el aniversario de la dictadura de Augusto Pinochet, un proyecto colectivo apoyado por la Asociación de Mail Art de Uruguay, en la que Antonio Ladra hizo una marcha como hombre-anuncio para hacer saber su preocupación por los peruanos. Padín escribió, "La cuestión no es solamente llevar el arte a la calle, sino transformar su significado social en acciones y trabajos que tienen que estar introducidos activamente en su desarrollo, haciendo referencia, ante todo, a aquellos problemas que se ocultan, sensibilizando a la gente, intentando darles ánimos para cambiar sus perspectivas. Y esa modificación cambiaría la obra de arte, su consumo e incluso la relación artista-espectador."